El buen mantenimiento de las instalaciones industriales es un apartado importante para su buen funcionamiento. Aspectos como las pérdidas de temperatura en diferentes puntos críticos de la instalación como pueden ser, válvulas, codos, racores etc…, poder auxiliar estos puntos de manera efectiva y práctica, y en muchos casos, sin necesidad de parar su funcionamiento “parada técnica” es un aspecto importante. Así como de poder reparar posibles fugas fácilmente identificando rápidamente su “punto de fuga” con una simple inspección visual.
Mantener una temperatura constante de los fluidos, sin pérdidas, también juega un aspecto importantísimo en la instalación.
PROLYMER SOF “S-IP”, STANDARD “M-IMP”, HARD “H-IP”, o HEAVY DUTY “HD”, proporcionan una solución completa para abordar una serie de desafíos críticos relacionados con la gestión de la temperatura, la integridad de las instalaciones industriales y de la seguridad laboral. Desde el aislamiento térmico hasta la prevención de condensaciones, corrosión y riesgos laborales, nuestro producto ofrece una protección integral y diversos beneficios adicionales. Además de facilitar el proceso de reparación en el caso de una fuga en la instalación.
Su aplicación, similar a la aplicación de una pintura, comienza por aislar térmicamente la instalación, incluyendo racores, válvulas, codos y otros componentes, al ser un aislante continuo evita los puentes térmicos y garantiza un funcionamiento más eficiente, manteniendo más estable la temperatura interna de las tuberías, previene de posibles condensaciones en su interior, lo que es esencial para mantener la calidad del fluido interno y evitar la corrosión bajo aislamiento (CUI/Redox) de los conductos.
PROLYMER SOF “S-IP”, STANDARD “M-IMP”, HARD “H-IP”, o HEAVY DUTY “HD” contribuyen a prevenir riesgos laborales al reducir la temperatura superficial de la instalación, evitando posibles quemaduras por contacto en casos de altas temperaturas. Además, aísla o mejora el aislamiento del equipo donde se aplica, mantiene más estable la temperatura del fluido interno y facilita las tareas de reparación y mantenimiento.
Todo un conjunto de ventajas que reducen gastos y por tanto, aumentan la competitividad aumentando márgenes industriales para obtener mejores resultados a final de ejercicio o bien aumentar la competitividad reduciendo precio en mercado.
